Ante el silencio de la Consellería de Sanidade, que al menos ayer no se manifestó en relación a la posible integración del Hospital do Salnés en el área norte de Pontevedra, los que sí se manifestron y ya empezaron a movilizarse fueron los representantes de los ciudadanos y los profesionales que ejercen en el centro de Rubiáns, todos ellos manifiestamente en contra de la unificación de los servicios sanitarios y de la pérdida de autonomía que disfrutaba el hospital comarcal.
Al parecer, la primera ficha la movió la a lo largo del fin de semana el delegado de la Xunta por Pontevedra. Cores Tourís ya hizo llegar a las autoridades sanitarias en Santiago su preocupación por esta cuestión, ante el temor de que suponga una merma de servicios y de pérdida de poder a la hora de tomar decisiones por parte del equipo médico y directivo del hospital.
Pero también la alcaldesa de Vilagarcía se manifestó en contra de esta iniciativa que, a falta de que se pronuncie la consellería, no pasa de ser un rumor, pero un rumor muy extendido en el hospital y que ya se ha convertido en temor, hasta el punto de que algunos médicos que trabajan en dicho centro aseguraron estar dispuestos a pedir el traslado si pierden la independencia de la que disfrutan ahora para ejercer su trabajo.
La segunda ficha, pues, la movió la alcaldesa, que se puso al frente de una iniciativa que tiene por objetivo convocar a la recientemente creada comisión de participación ciudadana, un ente que solo se reunió una vez el pasado mes de marzo pero que engloba a representantes de todos los concellos del área sanitaria, a las asociaciones de vecinos y a otros colectivos sociales. Dolores García quiere reunir de nuevo a la comisión para pronunciarse de forma conjunta en contra de la integración del hospital en el área norte de Pontevedra.
Otro representante político que se manifestó en contra de esta iniciativa fue Gonzalo Durán, que en declaraciones a una emisora calificó la idea como retroceso y lamentó que se disolviese la fundación que antes regía la gestión del hospital y que permitía, precisamente, conservar esa independencia que ahora está en peligro. El alcalde popular de Vilanova también defendió la gestión del actual gerente del hospital después de que el nombre de Gonzalo Durán sonase como posible sustituto de Pedro Soler. El regidor dijo que ni se lo habían propuesto ni lo aceptaría en caso de que lo hiciesen.
Autor y enlace: La Voz de Galicia (Arousa)